Los libros de Kosmopolis para este verano

Hay autores de todos los géneros e historias de todos los tipos, porque no creemos que haya un libro ideal para el verano, sino uno ideal para el estado de ánimo de cada persona. Por eso esta es una selección personal del equipo Kosmopolis que os puede orientar si no sabéis qué libro meter en la maleta.

Rosa Puig, que formó parte del equipo de coordinación, descubrió a Kim Stanley Robinson (Kosmopolis 2017) y explica por qué lo recomienda: «No soy lectora habitual de ciencia ficción, pero tengo que reconocer que la novela Aurora me fascinó y, en algunas cosas, me recordó los cuentos de Bradbury leídos durante la adolescencia. Es una historia situada en un futuro no muy lejano que nos ayuda a reflexionar sobre nuestro presente y que da unos giros narrativos que te mantienen constantemente a la expectativa. Nunca habría dicho que podría llegar a estar tan cautivada por historias de ordenadores cuánticos, órbitas planetarias, aceleraciones y desaceleraciones…» También recomienda La guerra no tiene nombre de mujer de Svetlana Aleksiévitx (Programación continua Kosmopolis 2016): «En realidad, recomiendo cualquiera de los libros de Aleksiévitx, porque explica cómo los grandes hechos de la historia, y también la caída del imperio soviético, afectan las vidas de las personas normales y corrientes. Quizá no sea una lectura demasiado veraniega, pero es necesaria y muy conmovedora. Hay que degustarla en pequeñas dosis.»

Mònica Muñoz, jefa de prensa, recomienda, ella sí, un clásico: Si te dicen que caí (Juan Marsé, Kosmopolis 2005 y 2015), «porque es la mejor novela de la posguerra que pasa en Barcelona; porque a partir de un microcosmos situado entre Gracia y el Guinardó, Marsé explica el cosmos; porque el Java y compañía son unos personajes que no olvidaré nunca; porque es un libro que cuando lo acabé de leer lo volví a empezar para saborearlo; porque en este país, en esta ciudad, todo el mundo tendría que leer Si te dicen que caí si quiere entender de dónde venimos». Y también aprovecha para reivindicar la figura de una editora, Valeria Bergalli, participante en Kosmopolis 2004 y 2015 y alma mater de Minúscula, «una editorial exquisita, con títulos tan conmovedores como Verde agua de Marisa Madieri, Siempre hemos vivido en el castillo de Shirley Jackson (en catalán en L’Altra Editorial), Bagheria de Dacia Maraini o La isla de Giani Stuparich, por escoger cuatro que no dejaría de releer».

Marta Giralt se encargó de la gestión presupuestaria y recomienda tres libros: La piel y la princesa, de Sebastià Alzamora (Kosmopolis 2006), El cerco, de Ismail Kadaré (Kosmopolis 2004) y El asombroso viaje de Pomponio Flato, de Eduardo Mendoza (Kosmopolis 2004). «Los recomendaría porque son libros basados en hechos históricos (una parte real, una parte imaginada) que han marcado algún período de la humanidad; hablan de política, de la libertad, de los convencionalismos, de las relaciones humanas, del miedo y de las dudas, te transportan a épocas distintas y te hacen pensar (mucho) cómo hemos cambiado (o no) nuestra forma de ver el mundo y nuestras relaciones con los demás y con nuestro entorno.»

Quima Farré, responsable de los textos del programa, recomienda un libro de Roberto Bolaño, un autor al que tuvimos en la primera edición de Kosmopolis, en 2002, y al que dedicamos una exposición, en 2013: «La pista de hielo me enganchó mucho, no solo por la trama policíaca sino por los personajes (tanto principales como secundarios) y por cómo estaba escrito, que pasaba en verano y te transportaba a la Costa Brava… Y por cómo trata temas como el amor, la inmigración o la corrupción, con una gran agudeza.»

Edgar Riu, encargado de llenar la web de contenidos, propone leer Ánima, de Wajdi Mouawad, que pasó por Kosmopolis en 2011, un año antes de que su obra Incendios se convirtiera en el éxito teatral de la temporada. Explica: «Para combatir el calor del verano os recomiendo los territorios fríos de Ánima. La novela es un viaje a la memoria y a la parte más animal del ser humano. Una historia oscura y violenta con sabor a tragedia clásica.»

Para Eva Rexach, responsable de las redes sociales del festival, el gran descubrimiento fue Pierre Lemaitre (Kosmopolis 2017), un autor que no había leído antes porque no es demasiado fan de la novela negra, pero cuando le cayó en las manos su último libro, Recursos inhumanos, fue suficiente para que le picara la curiosidad. El libro que recomienda es Nos vemos allá arriba, «una historia detectivesca ambientada en la Primera Guerra Mundial, con tres personajes magníficos y brillantemente escrita». Y también propone Chesil Beach de Ian McEwan (Kosmopolis 2011 y Programación continua Kosmopolis 2017), «un relato sobre cómo puede cambiar la vida de una persona por un malentendido. Es una historia triste pero a la vez muy bien narrada, que habla de la culpa y de las decisiones que hay que tomar (o que no se toman) en la vida».

Susana Fernández formó parte del equipo de publicidad de K17, y recomienda a tres autores. Toby Litt (Kosmopolis 2008): «Escojo Muerte en directo, una historia de amor que quizá no es amor; una investigación criminal llevada a cabo por… ¿la víctima? Todo me pareció interesante (forma y contenido), y también bien traducido, que es importante.» Mathias Énard (Kosmopolis 2011 y 2015), L’alcool et la nostalgie: «Me quedo con este porque en pocas páginas consigue hablar de todo lo que, en mi opinión, importa: amor y muerte y adónde vamos y por qué… Tan solo tres personajes. Y algún que otro secundario. Un libro bello de verdad.» Y, finalmente, J. M. Coetzee (Kosmopolis 2008), un autor del que recomienda dos libros, Hombre lento y Elizabeth Costello: «No puedo escoger entre estos dos. Los otros me apasionan, sí, pero estos dos estaría dispuesta a convertirlos en lectura obligada en cualquier universidad, biblioteca, etc. Cómo este señor consigue atrapar al lector con sus palabras aparentemente sencillas, comprensibles (¡desde luego!), y al mismo tiempo hacer pensar en asuntos desde otro punto de vista (imaginable o no), ¡me parece formidable, apasionante!»

Finalmente, Juan Insua, director de Kosmopolis, admite la dificultad de escoger entre uno o varios autores, porque todos los participantes en las distintas ediciones han aportado algo relevante para la evolución del proyecto y han contribuido a la creación de una literatura amplificada, transversal, expandida. Aun así, Insua se inclina por sugerir los libros de tres científicos cuyas obras son una buena aproximación al cambio de sensibilidad que necesitamos para enfrentarnos al desafío del calentamiento global. La memoria secreta de las hojas, de Hope Jahren, y Sensibilidad e inteligencia en el mundo vegetal, de Stefano Mancuso, porque nos permiten entender la importancia decisiva de árboles y plantas para el futuro del planeta, y Mentes maravillosas, de Carl Safina, porque demuestra la similitud entre las conciencias humanas y no humanas y trata de la empatía que nos lleva a repensar cómo interactuamos con los animales. Los tres autores estuvieron en Kosmopolis 2017.

Esperamos que con esta selección vuestras lecturas de verano sean variadas y curiosas y que os abran la puerta a más y mejores historias. ¡Felices vacaciones!